martes, 22 de noviembre de 2011


Capítulo 6: La huida de Hauffman

Tras varias horas de descanso el hombre de la montaña se despertó. Al descubrir que había sido salvado maldijo en voz alta. Se presentó a si mismo como Legna y se dispuso a acompañar a los personajes, en lo que ellos entendieron que él consideraba como una deuda de honor. Así, y una vez que Legna se hizo con unas viejas ropas de su cueva, de aspecto bastante aristocrático, pero chafado a la antigua volvieron a Hauffman.
En la entrada les esperaba Wulfric, quién sin dejarles avanzar más los condujo hasta el pueblo dónde habían tenido el combate con los no muertos. En una de las casas descansaba una herida Nadya. La mujer que la cuidaba les contó que mientras ellos estaban fuera la inquisición había llegado a Hauffman u había capturado a Noah. Además varios soldados de Tol Rauko también estaban presentes. AL parecer Nadya había intentado salvarlo, pero lo único que consiguió fue salir herida, pues al parecer había un inquisidor de gran poder dentro.

La herida de Nadya era, sin embargo de origen sobrenatural y parecía provocar necrosis. La magia de Luka no era suficiente para salvarla y los personajes suplicaron ayuda a Legna, quién había demostrado tener grandes habilidades mágicas. Tras una encarnizada discusión sobre lo poco que le importaba al hombre la vida de aquella mujer consiguieron convencerle para que la curase. Una vez despierta decidieron que había que salvar a Noah. Mientras los personajes y Nadya iban a la costa en busca de soldados Legna viajó hasta los muros de Hauffman para buscar una entrada secundaria. Finalmente y con varios soldados se presentaron en los muros de Hauffman.. Con la ayuda de la magia de Luka y Legna consiguieron colarse a través de varias salidas de alcantarillado en el precipicio que formaba los muros de la ciudad.

Una vez dentro lo primero que hicieron fué entregarle el hueso al señor Delacroix, quién apreció sumamente complacido, aunque no llegaron a fiarse de él y prometieron ocuparse de terlo vigilado. Por otro lado Harumi consiguió la ayuda de el capitán de la guardia (PENEMAN) en una insinuante conversación, quién estaba harto de que los curas no le dejaran ligar a gusto, pese a que demostró ser de la otra acera. Así esa misma noche, y con un margen de una hora concedida por el capitán consiguieron infiltrarse en el castillo. Bajaron a las mazmorras dónde descubrieron dos soldados de Tol Rauko custodiando las celdas de Noah y la madre de Ilia. La madre ya había fallecido. En lugar de entablar combate Luka demostró su “gran” dominio de la diplomacia con los soldados (“veamos, y si lo hablamos todos tranquilitos? No venimos en plan mata mata ni nada eh?” para que luego digan que no tengo paciencia ¬¬). Parecía que no iba a dar frutos la conversación cuando tras ellos apareció Delacroix acompañado de un inquisidor. Legna separó al inquisidor evitando que ellos fueran aplasta... quiero decir, que entraran en un combate tan complicado. Jax mató a Delacroix con un certero ataque en el cuello (hijo de su madre...). Mientras tanto en la sala de la que habían salido ambos una aberración atacó a los personajes, quienes unieron fuerzas con los soldados de Tol Rauko quienes no sabían nada aparentemente de lo que ahí estaba pasando y consiguieron recuperar el hueso. Liberaron a su vez a Noah y vieron como Legna era empalado brutalmente por el inquisidor. Aparecieron entonces los guardias de Nadya. Viéndose en desventaja el inquisidor huyó. Con la ayuda de Noah Luka consiguió curar a Legna con el mismo hechizo que él había usado en Nadya. Los personajes huyeron no sin antes ver como los soldados de élite del rey de Hauffman rodeaban a Peneman con la evidente intención de ejecutarlo por traición.

Así fue como huyeron hasta la costa. Dónde un gran zepelin bajó de los cielos. De él descendió un hombre jóven que se presentó como Klaus Steiner, primo de Nadya. Nadya instó a los compañeros a subir al zepelin y huir de allí, pues era evidente que la inquisición seguía tras sus pasos. Así tras una emotiva despedida subieron al zepelín, acompañados también por Legna, Noah e Ilia.


Capítulo 5: Mi nombre es Legna

La tempestad hizo que finalmente volvieran a perder el rumbo. Aquel tiempo parecía que no iba a cambiar y los personajes se vieron debilitados y sin refugio donde guarecerse. En medio de la desesperación una voz arrastrada por el viento les llamaba, incitándoles a acudir hacia ella. Con cautela decidieron buscar su origen. Se encotraron con una pequeña abertura en la montaña, a través de la cual consiguieron pasar. En el interior les aguardaba la figura de una pequeña. Sus ojos verdes y su pelo azul. La piel ligeramente azulada. Vestía un vestido corto casi como si el frío no la afectara. Se presentó como Ilia. En el centro de la cueva había un pequeño lago en donde curó las heridas de los personajes con poderes que Luka reconoció como magia, pero no hizo ningún comentario al respecto. Ilia les contó que vivía en esa cueva con su madre, pero que había sido atrapada por unos hombres con cruces en sus ropas y que ahora estaba sola. Los personajes temiéndose quienes eran los causantes de semejante desgracia le preguntaron si tenía algún familiar más. Ella les dijo que sí, que tenía a un padre que nunca había visto, pues su madre había discutido con él mucho tiempo atrás. Les mostró un viejo relicario que contenía un viejo retrato del hombre, quién resultó ser un jovencísimo Noah. Los personajes le confirmaron que conocían a su padre y le dijeron que la llevarían con el. De este modo nació una amistad entre los personajes e Ilia. Ella a su vez les prometió que les llevaría con un hombre que les indicaría como llegar a su objetivo, pues conocía todas las montañas, no sin antes advertirles de su ferocidad.
Una vez que la tormenta hubo pasado los personajes e Ilia se pusieron en camino. Finalmente llegaron a una zona de difícil acceso en la pared de una montaña. La atravesaron para llegar a un llano frente a una enorme cueva. Los personajes se adelantaron, más Ilia les advirtió que no lo hicieran, pues aquel hombre odiaba que se acercara nadie a su casa y probablmente les mataría. Sin embargo no fué neesario que entraran. Alertado por las voces el señor de aquel paraje salió a su encuentro. Ataviado unicamente con un pantalón con los pies descalzos y el pecho al descubierto, exhibiendo encima de su corazón un tatuaje de un círculo rúnico, con una melena de color azul como el mar helado hasta los hombros y unos inteligentes ojos azules que chispeaban de furia. A su espalda colgaba un mandoble de bello acabado y mortífero aspecto. Furioso preguntó a Ilia por qué había traído a esos extraños a su casa. Ilia le explicó como pudo las circunstancias apoyados por los personajes. Algo que captaron al instante es como se refería a ellos como "sucios humanos" o semejante, como si él mismo no lo fuera. Finalmente accedió a indicarles el camino con la seguridad de que morirían en aquel lugar maldito, o que en caso contrario le librarían de una molestia. Shin le preguntó su nombre pero le contestó que si sobrevivían se lo diría. Por último amenazó a Ilia de muerte si volvía a pisar aquel lugar (no obstante Ilia recordó las otras veinte veces que lo había hecho y pensó que quizás sobreviviera una vez más)

Caminaron durante un tiempo hasta que finalmente encontraron la entrada a la garganta que tan largamente habían buscado. La maldad que despedía aquel lugar se hacía notar ya desde lejo, con lo cual decidieron que Ilia se quedara afuera escondida hasta su vuelta. SIn más preámbulos entraron en el lugar. Dos paredes de hielo se cernían sus costados dejando ver a través de ellos varios cadáveres y zombies que reaccionaban a su paso, más no los atacaban. varios zombies en su camino les evitaban, como si algo les obligara. Al parecer Hringram no les había mentido. finalmente las paredes se abrieron dejando al descubierto un claro helado. Un boquete cerca de la pared del fondo y dentro los restos de Alkáiser. Encima flotaba la ánima de su amada, quién amenazaba en vano a los personajes. Entonces se escuchó un estruendo a las espaldas de los personajes, ante lo cual estos saltaron hacia los lados por instinto, salvo Shin, quién no fue lo bastante rápido y recibió todo el castigo de la embestida de aquel ser, saliendo despedido y clavándose violentamente en la pared. Aquel ser cuadrúpedo era un cadáver, o mejor dicho una construcción aberrante de carne y metal que por alguna razón se movía. El combate fué cruento. Todo parecía estar en su contra, hasta que un golpe de suerte hizo que descubrieran su punto débil. mientras tanto los restos de Alkáiser empezaban a moverse, alimentados por la sangre fresca de los personajes y la carne de los zombies que se habían acercado al boquete. También se alimentó del anima de su amada que se había acercado a él. Entre tanto los personajes consiguieron lanzar a la aberración contra el boquete dejándola inservible. Pero en lugar de mejorar la situación ésta empeoró, pues Alkáiser comenzó a alimentarse de los restos de la aberración reconstruyéndose cada vez más rápido. Los intentos de Jax, más resistente por alguna razón a sus ataques devoradores fueron en vano y se vio obligado a retirarse. Fue entonces cuando una figura alada cruzó por encima de ellos entre las nubes. Se escuchó un trueno y el hombre de la cueva apareció del cielo mandoble por delante, sesgando buena parte del cuerpo del ser y sujetándolo mientras gritaba "Acabad con el!". Así fue como combinando sus fuerzas redujeron a Alkáiser a un hueso que Harumi selló en un escudo par evitar sus rayos que todo lo consumían. Sin embargo el hombre de la montaña había sufrido grandes daños en su cuerpo por el contacto de Alkáiser y con un sonoro "joder" se desplomó en el suelo. Momentos después llegó corriendo Ilia, quién explicó que viendo a la aberración entrar corriendo fue en busca del hombre, quién de mala gana salió en su ayuda. Intentaron curar como pudieron al hombre, pero finalmente se vieron obligados a llevarlo a la cueva dónde vivía Ilia, dónde con un gran esfuerzo consiguió curarlo. En ese momento Luka descubrió que no era el agua la que tenía propiedades curativas, sino que debajo del estanque había un nexo mágico. Entonces se dieron cuenta del por qué de que la inquisición hubiera venido a un lugar tan remoto de las montañas y el interés que tenían por aquella gente.


Capitulo 4: Lo que está muerto...

La habitación estaba en silencio. El hombre cogió la caja de musica e intentó que funcionara, pero no lo hizo. Preguntó con voz gélida qué hacían en su castillo. Las respuestas que los personajes pudieron darle parecieron no satisfacerle, pues decidió por su cuenta obtener las respuestas directamente de la fuente. Uno tras otro el hombre fué hurgando en la mente de los personajes, llegando a lo más intimo de sus recuerdos y sentimientos. Esto fué lo que sintió Luka en aquel momento.
------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Mis funciones vitales dejaron de funcionar en el mismo instante en que dos iris de un color azul intenso se posaron en mi mirada. La profundidad de sus ojos era algo que no se podría explicar con palabras, una gran tristeza los inundaban y parecía tirar de mí como el caudal de un río, arrastrándome hacia el inexistente y claustrofóbico fondo. Ignoro si fue temor, respeto, o una mezcla lo que sentí en ese momento; pero si sé que, por mucho que deseara hacerlo, no me dejaba apartar la mirada.

El tiempo se había detenido y cuando quise darme cuenta él ya estaba sobre mí, con su lengua abriéndose paso entre mis labios –diría que mi corazón dejó de latir pero hacía tiempo que había entrado en un estado de shock comatoso–. Su tacto era desagradablemente áspero, y el gusto que imprimió en mi lengua era el de 400 años de podredumbre. No pude apartarme, rebelarme o sí quiera corresponder a su funesto beso, pues toda mi concentración estaba dirigida a la estabilidad de mis piernas, que se negaban a dejar de temblar, amenazando con dejarme caer indefenso al suelo. Una oleada de frío, procedente de su interior, empezó a entumecer cada uno de mis nervios, extendiéndose por mi cuerpo como unos tentáculos gigantescos que me mantenían retenido. Podía sentirle dentro de mi, notar su consciencia explorando cada recoveco, acariciando cada parte de mi ser... juzgando todos mis conocimientos, evaluando todas mis vivencias, incluso los más íntimos recuerdos... Quería detenerle, detener su intrusión en mi cabeza y su desagradable contacto... Quizá fue un pequeño gesto, un ínfimo movimiento, o simplemente que estaba en mi cabeza, pero acto seguido a ese pensamiento me asió por la camisa acercando más su cuerpo al mío e intensificando su presión sobre mis labios. Lo último que pude notar, antes de que esos desagradables tentáculos se retirasen de mi cuerpo dejando unos dolorosos agujeros en mi consciencia, fue cómo las lágrimas descendían inevitablemente por mis mejillas ante la brusquedad y el denso anhelo que Hringham imprimía en sus caricias... Ignoro si fue por el daño físico o por la tristeza que me suscitaron los sentimientos que proyectaba hacia mí en su contacto, pero si de algo estuve seguro en aquel momento fue de que nadie volvería a besarme con una intensidad igual...
-------------------------------------------------------------------------------------------------

Satisfecho con lo que había averiguado les contó su historia. Era un guerrero en vida. El más poderoso, tan poderoso que se podía enfrentar a cualquier hombre o bestia que habitara la tierra. Sin embargo no era feliz. En medio de su desesperación conoció a su amada y con ella contrajo matrimonio y engendraron un hijo. Más los dioses fueron crueles con él y crearon un monstruo en lugar de su hijo que sesgó la vida de la mujer desde su vientre escapando acto después sin dejar rastro. Profundamente abatido desafió a la propia muerte derrotándola en combate. Ésta al ser derrotada y conocedora del castigo que obtendría si le devolvía a su esposa muerta le concedió la vida eterna como una maldición disfrazada de don. Hringram furioso reunió el mayor ejército de muertos que jamás pisara Gaïa y se enfrentó a los dioses. Derrotado se encerró en el castillo de la media noche con una nueva maldición pesando sobre su ya castigada alma. La luz del sol le dañaría llevándolo hasta la locura. No lo mataría, pero si lo dejaría loco de dolor.

Tras haberles contado su historia y como recompensa a su tenacidad les dio protección contra los muertos que les acecharían de camino a conseguir su objetivo. Así mismo les indicó la dirección que debían de tomar para llegar allí. También les ofreció un libro escrito tiempo atrás por su fallecida esposa, ya que parecían haber obtenido su favor y podría serles útil. Harumi le suplicó a Hringram poder llevarse el vestido de la mujer para honrar su memoria. Hringram dudó, pero finalmente accedió a su petición. Les aconsejó por último que siguieran corriendo a su perro, pues en tan sólo dos minutos se encontrarían encerrados sin remedio en aquel desolado lugar. Sin dudar de sus palabras los personajes corrieron tras la figura fantasmal del cánido mientras los muertos se apartaban a su paso. Salieron del castillo para ver como este desaparecía en un resplandor rojizo, directo a la vigilia.


Capitulo 3: El castillo de la medianoche

Los héroes entraron en el castillo escapando de la ventisca. Ante ellos se presentó un amplio recibidor oscuro y lleno del polvo y la mugre de los años, pero a la vez majestuoso y melancólico. Harumi recordó entonces la historia que Francis Delacroix les había contado sobre Alkáiser, el general cuyos restos estaban buscando, y propuso adentrarse en el castillo en busca de pistas sobre el paradero de dichos restos, pues suponía que ese lugar podía haber sido la antigua morada de dicho general. Finalmente eligieron un camino y siguiendo un largo pasillo llegaron a una puerta de metal. La atravesaron y llegaron a lo que parecía una sala de baile. Larga y estrecha sinser capaces de ver su final. La pared de su izquierda repleta de espejos cubiertos de polvo y la de la derecha por amplios ventanales. Se adentraron un poco y cuano se quisieron dar cuenta la puerta se había cerrado tras ellos, sin hacer ningún ruido. Incapaces de abrirla fueron hacia adelante. Eran las diez y media.

Harumi estaba totalmente alerta y llevaba ya tiempo percibiendo extrañas variaciones en la realidad, como latidos, que solo ella parecía percibir. Mientras tanto Jax se adelantó sigilosamente hasta llegar a un bulto en el suelo de lo que supuso sería la mitad del salón de baile. Era el cuerpo de lo que parecía un juglar, un cuerpo que parecía llevar ahí mucho, mucho tiempo. Registrando sus ropajes Jax encontró un pergamino viejo y quebradizo que contenía el siguiente poema.
------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Sin descanso
escrita en las estrellas
descansa le historia de un hombre
que vivió para ser leyenda

entre las altas cumbres el se crió
mirando siempre de cara hacia el sol
pensando cada día quien debiera ser
aquello cuyo anhelo no lograba contener

como pedí al amanecer
una señal que me quisiera ofrecer
el como había de ser
algo en lo que por fin creer

(PARTE EMBORRONADA)

su fama así se extendió
el de la blanca espada
el hielo que siempre le rodeó
Un corazón que nunca se derritió

Y nadie hubo quien le derrotara
dioses y espadas se postraron
y así su mirada se apagaba
no existía pues ninguna razón

Vagó por la tierra sin alzar la mirada
sin fuerzas ya para alzar la espada
sin ideales y sin pasión
caminó hacia su propia liberación

En el vespertino alba a ella conoció
cielo y estrellas su canción
en sus ojos que todo iluminaba
vio reflejado entonces su corazón

Si tus noches oscuras pudiera ocultar
si tus ojos tan solo pudiera explorar
Si tus labios tan fríos pudiera besar
si tu vida y la mía no fueran una más

En la noche de nieve reciente
con el corazón solo en el presente
promesas y votos quisieron pronunciar
sin importar nada, sin importar que pudiera pasar

Los vientos quisieron a la pareja separar
la joven vida sin remedio sesgar
y así sumido en la desesperación
volvió a refugiarse en su glacial corazón

(PARTE INITELIGIBLE)

Si a ti, oh muerte, te consigo derrotar
a mi mujer amada tendrás que liberar
te ofrezco mi vida y mi palpitante corazón
no existe ningún otro medio ni ninguna otra razón

(parte borrada)

He sido derrotada y tu tenias la razón
no importa aceptar la derrota y te ofrezco un don
nunca morirá tu oscurecido corazón
y a ella no verás en esta encarnación

Enfurecido por aquella oscura maldición
el héroe volvió a su hogar
Con oscuros secretos experimentó
y con su nuevo ejército se dispuso a luchar

(Parte ilegible)

Vive hacinado en su prisión
huye de la calida claridad
ya nadie escucha esta canción
sus frios labios no volverá a rozar
--------------------------------------------------------------------------------------------------------
Las palabras de Jax flotaron por el aire mientras recitaba aquel extraño poema. Los compañeros guardaron un momento de silencio mientras empezaban a temerse dónde se encontraba y qué podía habitar aquel lugar. Además de ese pergamino Jax encontró una espada con un grabado de un león blanco en la empuñadura (el mismo signo que tenía el capitán Aurelius en la coraza que portara el día del funeral en la isla) Jax guardó dicha empuñadura en su mochila, dado que la hoja se deshizo en polvo según la recogió. Entonces Harumi empezó a ver extrañas figuras en los espejos. Primero tenuemente, pero poco a poco se iban haciendo más nítidas y todos sentían una presencia que les rozaba la nuca o les pasaba al lado como un soplo de aire helado. Con dichas señales siguieron adelante hasta el final del salón. Ahí se encontraron un trono y en el sentado una enorme armadura oxidada con un gran hacha y varios cadáveres a su alrededor. harumi entonces percibió con claridad en el espejo a varias parejas fantasmales que bailaban y giraban mecidos por una musica inexistente. Y el latido se hacía más acelerado.

Eran las 11 menos cuarto.

Fué entonces que harumi percibió un destello que atravesaba todos los espejos y acababa en la armadura para perderse en su interior. Y la armadura cobró vida, y con ella todos los esqueletos que la rodeaban. La batalla resultó feroz. Los esqueletos atacaban erráticamente sin ordenes aparentes y la armadura daba golpes calculados y de una precisión mortal. Harumi se vió gravemente herida y cayó al suelo en un charco de sangre, al igual que Jax en un momento avanzado del combate. Los héroes pelearon con gran ferocidad, acabando con 3 esqueletos, más otros 6 aun se mantenían en pie sin darles cuartel. entonces Shin se enfrentó directamente a la armadura apartádola del camino del resto de personajes. Con un golpe consiguió arrancárle el yelmo llevandose con ella la calavera que estaba en su interior, pero la armadura siguió sus feroces embestidas. Mermadas sus fuerzas Luca utilizó una runa de sanación con Haruimi quién inmediatamente se unió de nuevo al combate y Jax consiguió volver a la lucha a base de pura fuerza de voluntad, pues estaba gravemente herido. Desesperado Luca entonces decidió utilizar una habilidad que para él suponía un gran peligro. Cerrando su ojo rojo una lágrima de sangre resbaló por su mejilla y su vida se vió drásticamente afectada, sin embargo un círculo de runas se dibujó en el suelo y, tanto él como todos los personajes que en el círculo estaban vieron claramente un punto de luz dentro de la armadura. Atacaron sin descanso a dicho punto y, a medida que lo dañaban la armadura se volvía más y más torpe hasta que, finalmente aquel punto de luz explotó, no sin antes verse su verdadera forma, un espectro. La armadura cayó entonces y con ella todos sus sirvientes.

Eran las 11 y media.

Lejos de estar a salvo Harumi se dió cuenta de que todos los bailarines del espejo los miraban fijamente. Entonces en una puerta tras el trono vió una figura de blanco dándoles la espalda. Harumi propuso ir hacia allí, y mientras decía eso del alto techo empezaron a descender, desde extraños agujeros de oscuridad una cantidad imposible de cadáveres ahoracados que se agitaban mientras descendian hacia el suelo. Sin perder un minuto corrieron por el pasillo con aquella figura apareciendo y desapareciendo, guiándoles por el enresijo de pasillos hasta llegar a una habitación. Cerraron la puerta y examinaron el cuarto. La habitación de una mujer, con un tocador destartalado y una cama con dosel. en ella el cadáver momificado de una mujer vestida de blanco y una expresion de etenra agonia en su semblante. En su estómago exhibía un enorme boquete. Oyeron fuera como los ahoracados corrian por el pasillo para quedarse totalmente inmóviles frente a la puerta. Hallaron entonces sobre la mesilla una caja. Luka usando sus conocimientos científicos dedujo que no era una caja normal activó con un mecanismo oculto la musica de aquella caja, que empezó a entonar una melancólica melodía. entonces la habitación se volvio terriblmente fria, y se oyeron unos pasos en el pasillo. La puerta se abrió entonces dejando paso a un hombre de larga melena roja y ojos azules con una expresión de absoluta frialdad en su cara. Harumi entonces solo pudo susurrar "el guerrero de la espada blanca..."
A la espalda del sujeto brillaba iluminada por la tenue luz de la luna que se filtraba por el ventanal lleno de polvo un filo blanco y frio como el hielo.


Capitulo 2: El vuelo del cuervo

Tras haber ingresado con éxito en el grupo mercenario los héroes tomaron un barco que les llevaría al continente, internándose en las montañas de Hauffman. Una vez desembarcaron montaron e una carreta dirigida por Nadya y Noah que contenía diversas mercancias para vender en la ciudad. El camino entre las montañas resultó accidentado, dado que pese a las quejas de Noah por la decisión de Nadya por tomar un atajo a través de un paso demasiado estrecho y sin pavimentar ésta, con su habitual virilidad decidió seguir. A mitad de camino sufieron un accidente y dos de las ruedas del carro acabaron por romperse. Enfadada Nadya ordenó a los personajes que volvieran por el camnino y tomaran una bifurcación que llevaba a una aldea aislada en un pequeño valle en el cual supuestamente encontrarían ayuda. Dicho y hecho los personajes partieron hacia ahí. tardaron bastante en llegar, pero finalmente encontraron el lugar mientras atardecía. Todo parecía silencioso, demasiado silencioso. Jax a lo lejos vio lo que parecía una mujer parada en el porche de su casa mirando supuestamente al interior de la misma. Se acercó sigilosamente, pues desconfiaba del lugar. Según se acercó más al centro del pueblo pudo captar perfectamente el olor a putrefacción y por desgracia la mujer zombie ya lo había escubierto. Entablaron combate con el pueblo convertido en cadáveres andantes y con una enorme aberración salida de la vigilia. Los personajes se defendieron a la perfección, pero el combate contra la aberración se aventuraba difícil.

Sin embargo en el fragor del combate una figura de negro recortada contra el atardecer apareció. Sus brazos cubiertos de runas azules y el viento y chispas aremolinándose a su alrededor. Se paró y lanzó un rayo que tumbó a la aberración y lanzó a uno de los zombies contra una casa, en la que quedó estampado. De tal modo harumi aprovechó y ordenó que atacaran al corazón de la bestia, que había quedado al descubierto debido a su posiciión. Sin dudarlo sin introdujo su espada pistola en el pecho de la criatura provocandole un daño terrible. Enloquecida por el dolor la aberración corrió por el pueblo destrozando todas las casas en su camino. Jax corrió tras ellas esquivando los escombros que volaban con gráciles movimientos hundiendo su arma en uno de los costados de la bestia al alcanzarla en su carrera. Harumi dio su ultimo golpe haciendo que toda la criatura se convirtiera en hielo para desvanecerse momentos después. La batalla había terminado, por el momento.

El extraño se presentó ante los personajes como Luka, un mensajero que buscaba a Nadya y que había tenido conocimiento de que habían tomado ese camino. Una vez que consiguieron encontrar unas ruedas adecuadas para el carro marcharon hacia el mismo. Ahí el mensajero entregó su mensaje a Nadya quién, tras leerlo puso cara de disgusto, aunque anunció que Luka sería su apoyo a partir de ese momento, pues había movido algunos hilos para que viniera. Ya de camino en el carro Harumi se interesó por la natutaleza de los poderes de Luka, quien le contó que se trataba de magia. Según escuchó dicha palabra Harumi cambió su actitud a una aún más distante hacia la persona de Luka. Fué entonces cuando éste se levantó y empezó a dialogar consigo mismo para sorpresa de los personajes, aunque segundos depués se sentó asegurando que había sido culpa del cansancio. El viaje transcurrió sin mayores incidencias a partir de entonces.

Tras una jornada de viaje por fin alcanzaron la caital de Hauffman, en donde pasaron varias cosas, tales como que Harumi congeló el pene a un oficial que intentó filtrear con ella al preguntarle una dirección. Finalmente consiguieron alcanzar una especie de taberna donde se hacinaban diversos mercenarios en busca de trabajo. Ahí consiguiern dos misiones. La primera era recuperar los restos de un antiguo general de una horda de no muertos que siglos atrás habían asediado Hauffman y que según se contaba se ubicaba en una garganta en lo más recóndito de las montañas. Dicha misión fué proporcionada por un hombre de buenas ropas que estaba estudiando un gran tomo en su habitación privada de la taberna, llamado Francis Delacroix. La segunda era conseguir hielo de lo más alto de la montaña para un excéntrico mercader del sur. Para la segunda misión Harumi usó su poder para crear un hielo excepcionalmente frío quedando el mercader encantado y con la seguridad que en su viaje hacia el sur el hielos e mantendría congelado para su posterior venta en el desierto (¬_¬).

Finalmente partieron hacia las montañas, y tras un par de jornadas de viaje se perdieron en una fuerte ventisca. Tras deambular en medio de semejante tormenta divisaron a lo lejos lo que parecía un castillo en medio de las montañas y así sin tener en mente ninguna alternativa mejor se dirigieron a él con la ventisca acompañando sus pasos.


Capítulo 1: El aullido gris

Algo húmedo rozó la nariz de Jax quién se despertó para encontrarse con una cría de foca que lo miraba con curiosidad. Miró alrededor. Una enorme planicie de hielo. Hacía frío, más frio del que nunca había sentido. Miró al mar y vio salir burbujas de él y al no ver a sus amigos alrededor se zambulló en él. Dentro del módulo, bajo las frías aguas Shin peleaba por liberar a Harumi de los correajes que la habían mantenido sujeta durante el vuelo, más esta estaba inconsciente aún y los correajes eran fuertes. Jax llegó y viendo el panorama buscó la espada de Shin cortando los correajes. Juntos salieron a la superficie con Harumi y Jax consiguió reanimarla con un boca a boca. Una vez despierta miró a Jax como si hubiera sido violada. (¬_¬). Pronto descubrieron que sus cuerpos habían sufrido cambios. El más notable era el aumento en su movilidad, eran capaces de moverse más rapido, pero por desgracia la falta de costumbre y el hielo resbaladizo provocaban que apenas pudieran ponerse en pie. A mayores Harumi se sentía como nunca, con la mente abierta, sin la habitual molestia que sufría en la isla. tras unos instantes vieron a lo lejos como se acercaba un lobo de pelaje blanco hasta ellos y los saludaba cual perrito juguetón. Detás de él corría un hombre de unos 40 años de cabello rubio lacio y cubierto de pieles portando una lanza, que más tarde se presentaría como Noah. Cuando llegó hasta ellos les perguntó que les había pasado y después de una conversación les dijo que les conduciría hasta el castillo Gaïtende, donde moraba la señora Nadya.

Llegaron a lo que en un primer momento pensaron que era un pueblo abandonado. en realidad era un pueblo a medio construir que se había convertido en un bastión mercenario. En un pequeño monticulo se alzaba un pequeño castillo también a medio construir, aunque en mejor estado que la mayoría de los edificios. tras una espera bastante larga en la cual concieron a varios mercenarios y al cocinero del lugar lograron acceder a Nadya quién, tras leer detenidamente su mensaje y realizar algunas preguntas y aclaraciones les propuso entrenarlos par que pudieran protegerese de un inevitable conflicto con la inquisición.

Durante un mes los tres jóvenes entrenaron en sus respectivas disciplinas y pasado este tiempo realizaron la prueba que les convertiría en miembros del clan mercenario. La prueba consistia en un combate por parejas en el hielo con un mínimo de ropas pero estaba prohibido matar a nadie. Los equipos estaban conformados por Shin y Harumi en un bando y Jax y Sirius (uno de los mercenarios más jóvenes de Nadya) en el otro. El combate se decantó hacia el bando de Shin, dado que Harumi había incapacitado a Sirius con sus poderes pese a sus intentos por enfrentarse a ella. En una medida de gran inteligencia el semi Duk'zarist decidió utilizar su mayor resistencia a los elementos a su favor, escapando hasta que sus oponentes se vieron incapacitados por el intenso frio. De tal modo Nadya, quedando satisfecha les proclamó miembros de pleno derecho del clan "los lobos grises"

lunes, 21 de noviembre de 2011

La Isla


Día 0

Amanecía una mañana tranquila en la isla de “El límite” cuando dos jóvenes se levantaron a realizar sus actividades matutinas. Mientras Shin salía a correr por el pueblo Harumi realizaba sus ceremonias y realizaba una serie de katas con su bokuto.

Tras realizar estas actividades se dirigieron al instituto disfrutando de la tranquilidad que les proporcionaba la isla. Un cielo azul despejado, un sol radiante, gente amable y, en general un ambiente de calma y tranquilidad envidiable sólo interrumpidas por algún que otro incidente menor.. En el instituto se celebraba uno de esos eventos deportivos de un club en particular, en este caso uno de atletismo, y toda la gente estaba alborotada realizando apuestas ilegales o simplemente especulando sobre quién sería el ganador de este año. Ya en clase Shin se vio acosado por Jeremiah, quién se burlaba de él, pero se vio derrotado ante la muestra de frialdad ofrecida por Harumi hacia su persona. Tras las clases se realizó el evento de atletismo, en el cual participaban tanto Shin como Harumi. La carrera comenzó con la ventaja para Shin, pero de entre los espectadores surgió una figura alta y con cuernos que intentó placar a Shin y bloquearle el paso (un jayán nephilim). De este modo Jeremiah consiguió adelantarse con una sonrisa burlona. No obstante Harumi usando su arco de prácticas y sus poderes de balística consiguió entretener al gigante lo suficiente para que Shin pudiera hacer una finta y retomar la carrera y, realizando un gran esfuerzo, ganarla.

Mientras tanto un joven Jax miraba con orgullo el estado de su cultivo, al que había dedicado los esfuerzos de ese día. Y el sol se puso un día más.

Prólogo: Cae la lluvia

Día 1

Aquel día no amaneció como el resto. El sol brillaba tan radiante como siempre, pero a lo lejos se oían explosiones, como truenos de una tormenta lejana e invisible. Los guardias de la ciudad estaban visiblemente nerviosos, así como la mayoría de los ciudadanos con los que se encontraron en aquella mañana. A media mañana en el instituto se oían rumores sobre que la madre de Jeremiah estaba muy enferma y se temía por su vida. Pocas horas después el pueblo y el propio Jeremiah recibían la noticia del fallecimiento de la mujer.

A la salida del instituto la madre de Shin, con aspecto preocupado y ligeramente demacrado anunció que esa noche los 3 amigos y el padre de Harumi cenarían juntos en casa de Shin. En la cena hablaron sobre la triste noticia del día y de como, desde que su made enfermó, jeremiah se había vuelto más arisco y frecuentaba malas compañías. Amén de esto Shin preocupado por el aspecto de su madre intentó descubrir que le pasaba, pero ella le respondió con evasivas. después de la cena lso padres de los muchachos se quedaron bebiendo y charlando mientras que ellos subieron a la habitación de Shin. Desde su balcón pudieron ver algo que nunca habían visto, nubes negras desde el este, sobre el océano, nubes de tormenta, algo que jamás había ocurrido, con algún rayo azul quebrando el cielo a lo lejos, y frio, la temperatura había bajado, cosa que nunca había ocurrido. Harumi empezó a sospechar entonces que algo iba a ocurrir en la isla, y los tres decidieron que, tras el funeral, desobedecerían una de las reglas fundamentales de la isla, botarían un barco y navegarían lejos del límite permitido, aquel al que supuestamente los monstruos marinos no se acercaban.

Y así, con ese pensamiento flotando en sus mentes durmieron placidamente (después de que Shin dejó de roncar) con los estruendos de los truenos que cada vez sonaban más cercanos acechando su descanso.

Día 2

Shin se despertó temprano, como era habitual en él, y medio dormido empezó a bajar las escaleras en busca de algo comestible. Cual sería su sorpresa que encontró en la entrada a su madre hablando con el capitán Aurelius Martius. Shin se extrañó pues aún sabiendo que el capitán era un buen hombre tenía fama de ser estricto y serio y nunca había realizado ninguna visita a su casa. Interesado Shin se acuclilló en la escalera y escuchó.Captó una conversación en la cual sacó en claro que posiblemente alguien atacaría la isla próximamente y que, debido a ello y a la repentina muerte de Felicia (la madre de Jeremiah) tenían que decir la verdad a los habitantes de la isla. También vislumbró como su madre intentó tomar la mano del capitán y este, con una visible cara de sufrimiento, le dijo que quizás pudieran después del funeral, abandonando instantes después la casa con aire sombrío.

Confundido Shin subió a su habitación despertando a sus amigos y contándoles lo que había visto y escuchado. Harumi abrió entonces la ventana y asomandose vió algo que la llenó de sorpresa, y en su mente se empezó a formar una idea. En la isla estaba lloviendo. No era una lluvia fuerte, pero era lluvia, algo que jamás había sucedido en todos los años que llevaban en la isla, y hacía frio, más frio que el día anterior. sin embargo le extrañó algo. sobre ellos colgaban nuves grises, sin embargo la tormenta en el este no se había movido. Con la cabeza llena de conjeturas decidieron ir al funeral.

Cuando llegaron las nubes se habían despejado, no obstante a lo lejos se veia aun la tormenta, que no se había movido, sin embargo los truenos eran cada vez más frecuentes y sonaban con más fuerza. Ahí en el cementerio, junto al ángel femenino esculpido en piedra negra (aparentemente) que miraba melancólicamente hacia el este, ahí donde se cernía la tormenta, fué enterrada Felicia. El alcalde dijo unas palabras hasta que emocionado dejó hablar al capitán Aurelius. Éste ataviado con una armadura con el símbolo grabado de un león blanco les habló entonces de que podían haber salvado a esa mujer si hubieran dejado al lado sus prejuicios, y que era el momento de que supieran que las cinco piedras negras que estabn repartidas en la isla (incluida la del angel), cada una mirando a una dirección habiendo una más grande en el centro, habían conformado la que era hasta la fecha su prisión y su salvación. Fue entonces cuando el capitán se dispuso a decapitar a aquel ángel negro. Sin embargo, en el cúlmen del momento una enorme explosión hizo temblar la isla, un trueno como ningún otro, como si algo se hubiera roto y una espada atravesaba el pecho del capitán. A lo lejos uno tras otro surgían barcos, todos con una enorme cruz negra en sus velas blancas. La gente empezó a huir despavorida mientras los guardias cerraban filas alrededor del capitán herido. los personajes se vieron arrastrados por la multitud. Se dirigieron al gimnasio del instituto, donde cogieron diversas armas de práctica. entonces las campanas empezaron a repicar y supieron que los invasores habían llegado al pueblo. Salieron fuera donde se encontraron con la madre de Shin, la cual les condujo hacia su casa, donde había una ruta de escape. Debajo de las tablas del salón había una trampilla hecha de metal negro. uno tras otro fueron pasando. de pronto un hombre de largo pelo marrón vestido de negro, con una cruz estampada en el pecho y dos espadas, una roja y otra negra (una de ellas la que había empalado al capitán) entró en la casa derribando la puerta. la madre de shin con movimientos inhumanos empujó a su hijo dentro del túnel sellando la trampilla tras de si. No importó cuanto lo intentó, la trampilla no se abrió, y silenciosas lágrimas cayeron por su rostro mientras caminaban por el angosto túnel, sólo iluminado por unas tenues lineas azuladas en las paredes del pasillo.

Cuando habían caminado unos 15 minutos se encontraron con un guardia portando una linterna en mitad del pasillo. Les indicó que siguieran, ya que encontrarían a alguien que les podría explicar más de toda aquella locura mietras él protegía el lugar del hombre de la máscara. Así lo hicieron, y un tiempo después llegaron a una amplia sala cuyas paredes eran metálicas y recubiertas por extraños circuitos azules. en el centro una enorme piedra(?) negra y apoyada en ella, inerte, el capitán Aurelius. cuando recobró la consciencia los miró a todos y les explicó que esa isla era un experimento para descubrir si las distintas razas podían convivir, pero que había gente que no quería que eso pasara. Además les contó que por una razón demasiado compleja para contarla en esos excasos instantes era de vital importancia que sobrevivieran, que toda la gente que moriría hoy moriríra protegiéndoles. Dicho esto entregó su espada a Shinji quién se interesó por la relación entre el y su madre. Él colocó una mano en su hombro y le dijo que algún día lo entendería. Luego les miró a todos y se disculpó por no haber podido protegerlos y abrió la piedra, la cual no era otra cosa que una máquina y les entregó un mensaje para una mujer llamada Nadya, que debería de ayudarles cuando aterrizaran. Uno tras otro los confusos personajes fueron entrando en la cabina, pero Harumi se dió la vuelta y con una sonrisa radiante dijo "muchas gracias por habernos protegido". Aurelius bajó la vista y una silenciosa sonrisa cruzó sus cuarteados labios. Una vez que estuvieron dentro Aurelius empezó a teclear en el aire, creando runas ahí donde se posaban sus dedos y murmurando extrañas palabras. Finalmente tocó la "piedra" y esta se recubrió de runas rojas. Harumi sintió un agudo dolor de cabeza y se desvaneció. Entonces la puerta del laboratorio se abrió de golpe y el hombre enmascarado entró en la estancia. Aurelius se dió la vuelta y desenfundó su daga. Los personajes nunca supieron lo que hablaron, pero el hombre se quitó la máscara antes de atacar al capitán por ultima vez.

Y entonces la máquina se elevó y vieron la destrucción en la isla, el fuego y los cadáveres y el padre de Harumi en medio de la lucha miró al cielo y sonrió. se dirigieron hacia el este surcando los cielos, pasando por encima del ángel negro que, cubierto por la sangre del capitán miraba hacia la tormenta a la que la nave se dirigía. Entraron en la tormenta como una exhalación y cuanto más se adentraban más rayos azules se cernían sobre la máquina. El cristal de la empuñadura de la espada de Shin emepzó a refulgir con un brillo azulado a su vez. Y chocaron contra algo invisible y la nave peleó por avanzar mientras los rayos la sacudían. Entonces un estallido y los personajes perdieron el sentido.

Habían abandonado la isla.